LA HISTORIA DE FADAK
Fadak era una tierra fértil cercana a Jaibar, que distaba de Medina aproximadamente unos ciento cuarenta kilómetros. Luego de la victoria de los musulmanes en Jaibar el lugar fue considerado como un lugar de apoyo estratégico para los judíos residentes en el Hiyaz. Tras la derrota de los judíos de Jaibar, Uadiu-I-Qura y Timá, y al alcanzar el norte de Medina, el Profeta envió un mensajero de nombre Muhit a los jefes de Fadak a fin de terminar con las fuerzas judías de aquel territorio, que significaban para el Islam y los musulmanes un peligro latente y un punto desde donde se estimulaba a los enemigos de la verdad. Iusha Ibn Nun, jefe del lugar, prefirió la paz y la rendición a entablar la guerra, y se comprometió a poner a disposición del Profeta (B.P.) la mitad de la cosecha anual de la zona, a vivir bajo la bandera del Islam y a no instigar ni urdir maquinaciones contra los musulmanes. En retribución a la cosecha que ellos entregarían el gobierno islámico debía garantizar la seguridad de sus tierras. Las tierras que se obtienen a través de la lucha pertenecen a todos los musulmanes, y la administración la asume su líder, pero las que se obtienen sin luchar pertenecen a la persona del Profeta y a los Imames que le sucedieran. Ellos podían hacer con ellas lo que desearan: venderlas, alquilarlas, regalarlas, etc. Ta mbién podían solventar las necesidades de sus parientes. Por lo tanto el Profeta obsequió Fadak a su amada hija Fátima.