El décimo octavo día del mes de Dul-Hiyya nos recuerda un día importante en la historia. El día en que el Santo Profeta (PBD) designó oficialmente al Imam Alí (P) como su sucesor, y fue entonces que el Arcángel Gabriel descendió trayendo esta aleya al Profeta (PBD):
“Hoy, los que no creen, han desesperado de que vuestra religión decline. Por tanto, no les temáis a ellos, temed de Mí. Hoy he perfeccionado vuestra religión y he completado Mi bendición sobre vosotros”
Fue el día cuando los incrédulos cayeron en las olas de desesperanza, porque esperaban que la religión del Islam fuera basada en una persona, y pensaban que tras el fallecimiento del Profeta (la paz sea con él), la situación volvería a ser como la era pre-islámica, y el Islam sería gradualmente desaparecido. Sin embargo, cuando vieron que un hombre que, en términos de ciencia, piedad, poder y justicia después del Profeta (la paz sea con él) no tenía rival entre los musulmanes, fue elegido como sucesor del Profeta (la paz sea con él), llegaron a comprender que el Islam era una religión auténtica y estable.
Fue en este día que la religión del Islam alcanzó su evolución final, porque sin la determinación del sucesor del Profeta (la paz sea con él) y sin aclarar la condición futura de los musulmanes, esta religión no habría alcanzado su perfección.
Fue el día en que las bendiciones de Dios evolucionaron al identificar a un líder supremo como Ali (P) para el futuro de la comunidad musulmana. Este día, el Islam, al completar sus planes futuros, fue aceptado como la última religión de Dios.